Todos los colores del arco iris brillan cuando la pelota rueda por los suelos. Al mismo tiempo, los bebés pueden tantear con sus manos los diferentes tejidos de que consta. La pelota rueda pero no se aleja gracias a su forma, lo que estimula el gateo evitando la frustración que genera que la pelota se quede fuera del alcance.
Con muchos efectos acústicos y diferentes tejidos para palpar. De inspiración Montessori.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.